jueves, 20 de julio de 2017

EL AUTENTICO VALOR DE LA SEGURIDAD TURÍSTICA




Ref: Global Protection Gate.

La solución al desafío de la inseguridad se irá alcanzando a través de profundos acuerdos entre la sociedad y el sector turístico, lo que obligará a poner en marcha iniciativas no tenidas en cuenta hasta la fecha, que darán paso a un paulatino reconocimiento de lo que supone la inseguridad integral para los destinos y el sector.

Partimos de destinos e intereses turísticos que conviviendo con la inseguridad, utilizan infinidad de clichés, consignas, eslóganes que, unidos a las nuevas tecnologías, les permiten navegar con cierta autocomplacencia pese a seguir soportando dosis y realidades inseguras con las consiguientes dudas y falta de credibilidad. Esto hace que, desde el sector, la auténtica reacción ante la inseguridad tarde mucho en darse, lo que pospone y dificulta el llegar a superar dichos escenarios y situaciones límites.
Además, tal es la fuerza de “lo establecido en materia de seguridad” que existen escasas posibilidades de alterar este escenario mediante el desarrollo de iniciativas y políticas más transversales. 
Y es que están muy definidas las estructuras, responsabilidades y funciones de seguridad y su relación, siempre puntual y diplomática, con un sector turístico que, en la mayoría de los casos, continua  acomodado y con una notable falta de convicción en esta materia. Ello hace que se acepten como “buenas” las realidades existentes aunque todos sepamos que la inseguridad, en mayor o menor medida, sigue estando presente.

Tomando todo ello como referencia; ¿por qué es necesario profundizar en el valor de la seguridad turística?

Porque la seguridad turística se convierte en un nuevo campo de conocimiento para muchos agentes y estamentos. De hecho, profundizar en la seguridad turística no significa negar la realidad existente, la inseguridad es algo inevitable que está ahí, y a la que se debe de hacer frente integralmente.

Porque los que se encierran en “lo suyo” y en “a mí esta vez no me ha afectado” en su fuero interno, son conscientes que el desarrollo de su actividad no satisface integralmente las demandas del propio sector y de sus turistas y visitantes.

Porque existe “otra seguridad de rango superior” necesaria a todas luces, pero que no tiene en cuenta ciertos factores fundamentales para el sector y su desarrollo.Un claro ejemplo que se percibe en la mayoría de los destinos internacionales es, la existencia de una “prioridad y certeza policial”  que, considero sería aconsejable que estuviera acompañada de un conjunto de procesos decisivos para la suerte turística de los destinos. Si esto no se da, se seguirán obviando las necesidades reales del sector, la frustración seguirá estando presente y continuará asentándose esa dudosa reputación entre los mercados y los turistas.

Porque en la seguridad turística, una mayor participación sectorial (no solo monetaria) no es obstáculo ni enemiga de nadie. Poder intercambiar opiniones sobre lo que se ha de hacer en esta materia, supone un salto cualitativo para el sector y para los colectivos e instituciones colaterales.

Para que todo ello se desarrolle con total normalidad, las demandas del sector no deben tratar de agitar la estructura de seguridad existente sino que, desde una mutua aceptación, se ha de tender al enriquecimiento, a la dotación de mayor valor para todas las partes implicadas y en consecuencia, a la mejora de la exportación del servicio turístico nacional.
Pensemos que, frente a la angustia que genera la inseguridad, su desarrollo sectorial ha de conllevar la superación de funciones y responsabilidades preestablecidas que irán generando un escenario social y turístico más solidario y compartido.


Porque en definitiva, cuando un país o destino se enfrenta a una inseguridad persistente, no basta con apelar y utilizar las estructuras y normativa vigentes, sino que se deberán buscar nuevas fórmulas y relaciones que las superen y complementen; donde queden perfectamente delimitados los objetivos, no solamente sociales sino también sectoriales.

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