miércoles, 14 de diciembre de 2016

Los seguros de viajes y la seguridad turística. (II)












En el artículo anterior, centré mi exposición en la presencia de las compañías de seguros como efecto de las dudas, crisis e incertidumbres que se generan desde algunos destinos turísticos.   
En esta segunda pete, considero oportuno incidir en la/s causa/s de la violencia e inseguridad y la relación con dichas compañías de seguros.

Se recuerda que vivimos en un mundo globalizado y mayormente capitalista, donde las nuevas tecnologías juegan un papel decisivo, donde surgen nuevas servicios, demandas y necesidades, entre ellas, los seguros de viajes, que se introducen en los mercados de consumo para favorecer la toma de decisiones a la hora de los desplazamientos y estadías.  
Y es que, existen realidades turísticas que necesitan ser complementadas para mantener su posicionamiento entre los mercados y clientes y con ello, facilitar la comercialización de sus productos y servicios. Unos seguros de viaje, adquiridos adicionalmente por los turistas para poder llegar a disfrutar de las bondades del destino elegido.     
Cuando esto ocurre, se nos está informando que el desplazamiento y el destino generan  una serie de dudas, interrogantes  e hipotéticos peligros, en este caso, en materia de seguridad turística, que posibilitan que haya lo que denomino, el “efecto”  en forma de cobertura de un seguro.
Debemos de interiorizar que las compañías de seguros operan y lo seguirán haciendo sobre los efectos y, con ello, podrán facilitar los viajes y estancias, pero lo harán sobre una debilidad o mal endémico; en este caso, las crisis y la inseguridad de los destinos y la escasa credibilidad que ello genera entre los mercados.
 Llegados a esa punto, sería aconsejable que los responsables de los destinos profundizaran en las “causas”, violencia, inseguridad, reales y percibidas, que se dan en dichos escenarios
La/s causa/s de la violencia e inseguridad que no son tratadas profundamente hacen que, entre otros aspectos, proliferen éste y otros tipos de productos y servicios. En este sentido, los seguros de viaje se consolidan cuando el tipo de violencia e inseguridad tiene una dimensión media o “manejable”, lo que convierte a esos destinos en terreno abonado para este tipo de prestaciones.
Niveles de violencia e inseguridad medios o “manejables”, normalmente muy asentadas en los destinos, que van condicionando su poder de emprendimiento sectorial con la consiguiente  repercusión externa que, sin llegar a alcanzar el grado de notoriedad y explosividad máxima, va minando la percepción del país y de sus atractivos.
Y es que el tratamiento de la causa sigue siendo la asignatura pendiente…La causa no se toca o se toca en pequeñas dosis, la causa no se menciona o se menciona puntualmente. Cuando es tomada como referencia normalmente, es para dotar de argumentos y vida a los servicios antes citados.
Por el contrario, rara vez es tomada con la intención de disolverla mediante actitudes entrelazadas de carácter preventivo y paliativo cuando, todos somos conscientes que el nivel medio o “manejable” de la violencia e inseguridad, puede llegar a desbordarse y poner en entredicho los seguros y todo el conjunto de tácticas y estrategias, algo que ocurre más habitualmente que lo deseado.
Desde mi punto de vista, la causa de la violencia exige de un tratamiento más íntimo a la vez que reflexivo. Necesariamente menos llamativo y, en gran medida, mucho más innovador, capaz de aglutinar voluntades muy dispares que permitan a los destinos y a los mercados superar las inquietudes e incertidumbre con la que siguen conviviendo porque, aunque no lo admitan, siguen conviviendo con la inseguridad y violencia pese a todos los esfuerzos que siguen realizando en contrarrestar los efectos.
Por lo tanto, el tratamiento de la causa o raíz de la violencia e inseguridad social de un destino, y por extensión también turística, exige admitir íntimamente las deficiencias socio turísticas, admitir que no nos gusta la situación, que es un “guión heredado” que es necesario modificar.
La verdadera causa, la violencia e inseguridad existente posibilita que, muchos responsables públicos y privados de esos destinos, sean capaces de visualizar el escenario ideal en los que les gustaría desempeñar sus funciones y cometidos. Ello supondría apostar por procesos y valores más profundos con la finalidad de convertirse en paradigma social y turístico de sus respectivos países y destinos.
Procesos y valores profundos que además de mejorar y superar la situación de violencia e inseguridad, permitiría ampliar la actual gama de productos y servicios, entre ellos, los relativos a los seguros de viaje y derivados.


No hay comentarios: